El Baby Led Weaning consiste en la introducción de alimentos sólidos en la dieta de un bebé tras la lactancia exclusiva de los 6 primeros meses de vida. Ésto, llevado al extremo, consiste en evitar totalmente los llamados «potitos» o purés para bebés y sustituirlos por alimentos no procesados. Vamos, que coman comida real de verdad.
Este tema, como tantos otros relacionados con la nutrición infantil, es un tanto controvertido, pues hay muchos detractores (usualmente por la falta de información y/o por dejarse llevar por las tradiciones) que consideran que esto no es «lo que hay que hacer».
Es una práctica cada vez más aceptada y extendida, pero requiere una dedicación mucho mayor, así como un cuidado especial en todo momento. Me resulta muy interesante hablar de ello en este momento pues mi hijo Bastian está justo entrando en la etapa adecuada para iniciar esta técnica de alimentación infantil. Además para Elena y para mi va a ser algo relativamente nuevo pues Bruno, nuestro hijo mayor, tuvo algunos problemas de intolerancias en esta edad y, aunque nos lo planteamos y nos hubiera gustado mucho probarlo con él, no nos fue posible. Así que tenemos muchas ganas de empezar con Bastian y ver qué tal le va. Con lo comilón que es, tenemos muchas esperanzas en que sea una experiencia muy interesante para todos.
¿Qué beneficios tiene el BLW para un niño?
- Se alimentará de una forma natural, perfeccionando también destreza para coger objetos con la mano, mediante la ingesta de alimentos reales.
- Va a relacionar formas con sabores, lo que le ayudará a no rechazar ciertos alimentos cuando sea un poco más mayor sólo por su aspecto, algo bastante común en la relación de los niños con los vegetales.
- Se acostumbrará a comer «de todo», es obvio que no le va a gustar todo lo que le deis, pero es más probable que un niño coma de todo a esta edad que cuando sea más mayor, así que si se le introduce más variedad de alimentos ahora, tendrá menos reparos en probar cosas nuevas a medida que vaya creciendo.
- Desarrolla antes la capacidad de masticar y tragar alimentos, lo que le ayuda en su desarrollo físico.
¿Qué tener en cuenta para iniciar a tu hijo en el BLW?
Lo primer y fundamental, es que el bebé tiene que poder estar sentado, normalmente a los niños se les inicia en esta práctica alrededor de los 6 meses de edad, que suele ser también cuando empiezan a sentarse y permanecer erguidos, así como también es cuando se les empieza a introducir otro tipo de alimentos que no sean la leche materna.
Después, otra cosa importante, el bebé debe ser capaz de coger cosas con la mano con cierta facilidad. El BLW va a ayudarle a perfeccionar la técnica, pero ya debe poder coger cosas por sí mismo.
Importante, debe también demostrar interés por la comida, sentarlo en vuestro regazo cuando estáis comiendo para ver si se siente atraido por lo que vosotros estáis haciendo es una manera de comprobar si está preparado. Normalmente si veis que coge los alimentos y se los lleva a la boca es un buen momento para empezar. Normalmente esto también se suele dar alrededor de los 6 meses de edad.
Si aún no se dan todos estos casos, tened paciencia, cada niño tiene su ritmo y no es bueno forzar las cosas, pues podemos conseguir el efecto contrario, que rechace los alimentos. Esperad y continuad intentándolo cada semana sin insistir mucho hasta que veáis que tiene algo de interés.
Ok, lo tengo claro y mi hijo está listo, ¿cómo empezamos?
En primer lugar, hay que entender que no se trata de darle lo mismo que comes tú a un bebé. Hay que empezar seleccionando los alimentos y prepararlos para que estén en condiciones óptimas para el consumo de un niño tan pequeño.
También hay que tener en cuenta el tema alergias e intolerancias, pues es en esta etapa cuando pueden empezar a manifestarse, así que hay que ir con cuidado.
Los alimentos por los que se suele empezar son las puntas de pan, para que vaya chupando, ablandando y tragando, esto les suele encantar y es una manera perfecta de introducir el gluten en los bebés. Recordad, no les deis el alimento vosotros, sentad al niño, ponedle el alimento delante y que sea él mismo quien lo coja y se lo lleve a la boca. Vosotros simplemente controlad la situación, que no se lo introduzca demasiado, que no trague un trozo muy grande, que experimente con el sabor y la sensación de algo nuevo. Esto les encanta pues los niños tienen un entusiasmo e ilusión natural por la experimentación y el descubrimiento de cosas nuevas.
Para vegetales podemos empezar con brócoli, zanahoria y patata cocidas, todo muy cocido que esté muy blandito para que sea muy fácil de tragar. Recordad, es recomendable no introducir más de 1 alimento al mismo tiempo por primera vez en la dieta del bebé, de este modo si esperamos un par de días entre cada alimento podemos ver si le provoca alguna intolerancia o alergia. Una vez que este tipo de alimentos está dominado se puede introducir algún otro, como por ejemplo tiras de carne lo suficientemente grandes como para chupar como si fuera una piruleta en lugar de tragar.
Mi hijo prepara unas liadas que no me parecen normales, ¿le ayudo?
Tened paciencia, vuestra función en esto se limita a ofrecer, observar y proteger. Ofreced alimentos y dejad que sea el bebé quien los coja, de este modo desarolla la coordinación ojo-mano-boca, algo muy importante. Observad como se interesa por los distintos tipos de alimentos, como se divierte probando y experimentando (ésto les encanta) y aseguraos que no se atraganta. Por lo demás, dejar que vivan esta experiencia que resultará muy enriquecedora y entretenida para ellos y para vosotros.
No os preocupéis por el jaleo que supone en concepto de pringue, esto es así, aceptadlo y lo disfrutaréis. Una trona con bandeja, o bien arrimado a la mesa y un delantal o babero ayudarán a reducir el nivel de liada.
Conclusiones
El Baby Led Weaning no es una ciencia, es una práctica, y como tal, no es para todo el mundo, ni padres ni bebés. Si te interesa, pruébalo, si te va bien, sigue adelante, si no, siempre hay alternativas. Hay algunos estudios que relacionan esta práctica con menores problemas de obesidad en etapas posteriores, con mayor confianza en uno mismo, menor reticencia a probar nuevos alimentos. Lo que es seguro es que no va a perjudicar a tu bebé y vais a pasar unos buenos ratos si no te importa pringarte un poco. Así que, qué puedes perder?
¿Quieres saber más?
Hay muchos libros sobre el Baby Led Weaning, yo os recomiendo este, se llama [amazon link=»8497991133″ title=»El Niño ya Come Solo» ] y es muy interesante. Seguro que os ayudará a descubrir, entender y apreciar esta práctica.
[amazon box=»8497991133″ title=»El Niño ya Come Solo» ]
Espero que te haya gustado el artículo y que te sea de utilidad, si es así te agradezco que compartas esto con tus contactos para que más gente conozca este blog y pueda ayudar a resolver dudas que otros padres puedan tener en este apasionante mundo que es la crianza.
¡Hasta la próxima capitanes!
Deja una Respuesta